Desgracias Perdidas, favores muertos

En el ser humano, el pedir y hacer favores, es algo cotidiano, las personas nos caracterizamos por ayudar al prójimo, por apoyar al otro en los momentos difíciles o cuando este necesita de una mano amiga, este acto de hacer favores se supone que debería ser reciproco, puesto que como dice el refrán “Hoy por ti, mañana por mí” o quizás este que lo conocí gracias a un querido profesor “Ayúdame que yo te ayudare”, pero hay personas en el mundo que manchan esta bella cadena de ayuda, de solidaridad, hay personas que en ocasiones no merecen ser ayudadas ni apoyadas.

Los peruanos nos caracterizamos por ser solidarios, por darnos la mano cuando más lo necesitamos, muestra de ello, son las grandes victorias obtenidas cada año gracias a la TELETÓN, o quizás a las grandes colectas que se realizan para una causa justa y de necesidad, desde las grandes colectas a nivel nacional hasta una pequeña recaudación en un pueblo lejano, los peruanos nos solidarizamos siempre, pero a veces por ser solidarios, terminamos siendo estafados, terminamos ganado grandes desilusiones que nos quitan el gesto de seguir ayudándonos.

Lo que paso unos meses atrás con el caso de los padres de Adrianito, causo una conmoción muy grande acá en Perú, muchos artistas, figuras públicas y ciudadanos de pie, nos sumamos a una campaña de solidaridad para apoyar a un niño que sufría de una enfermedad y que necesitaba la ayuda de todos, la campaña iba bien, se estaba poco a poco acercándonos a la meta, hasta que por la ESTUPIDEZ de sus padres, provoco la DESILUSIÓN de todos aquellos que se sumaron a esta campaña y que un inocente termino pagando las consecuencias, los padres de Adrianito, se aprovecharon de la solidaridad de uno, el dinero que se suponía serviría para la operación de este niño, termino siendo utilizado en la compra de un carro 0 km, un auto del año, provocando consigo que muchos peruanos se sintieran estafados y defraudados con ello, muchos peruanos que con su aporte económico pensaban que estaban apoyando a un niño que lo necesitaba, terminaron llevándose una desilusión inmensa, esto causo que la campaña de solidaridad no siguiera más, puesto que la confianza depositada en ellos se quebró.

Así puedo numerar muchos casos donde personas inescrupulosas se aprovecharon de la solidaridad de uno, pero hay otro tipo de casos, que me tocó vivir, y que quisiera contar mi experiencia… 

Bueno, una de mis características es que me gusta apoyar, mientras tenga como, me solidarizo con muchas causas y personas, no soy de las personas adineradas, nada que ver, sino que cuando uno de los míos necesita apoyo, no lo pienso dos veces y mientras pueda apoyo, porque sé que esa persona lo necesita y como personas debemos siempre apoyarnos – y con esto no estoy sacándolo en cara, nada que ver, sino trato de contar una experiencia vivida – y bueno, como estaba diciendo, trato de ayudar a quien pueda pero nunca pensé que cuando mi persona necesitara de un favor, MIS AMIGOS ME DIERAN LA ESPALDA y me cerraran oportunidades… 

Hace poco tuve una recaída económica, y en la cual me sentía frustrado por esa situación, lo cual me hizo hacer cosas que por lo general no lo hago, esta situación me llevo a acercarme a unas personas y solicitarles su ayuda con un pequeño préstamo económico, estas personas eran a aquellas que alguna vez se acercaron a mí para lo mismo y no dude en ayudarlos, por eso no pensé que me darían la espalda, puesto que ellos mismos sabían que era lo que motivaba a uno para hacerlo. Me lleve una desilusión, ninguno de ellos me pudo ayudar, alegaban muchos motivos, según ellos andaban en la misma situación, otros que no contaban con el dinero que yo necesitaba y un sin fin de motivos que les impedían apoyarme, yo quiero creerles que en verdad no podían, pero bueno solo Dios sabe la verdad, esta situación provoca “Sentimientos Encontrados”, no encuentro las palabras que describan que se siente, esto me dejo una Lección: “No siempre las personas que uno apoya, te apoyaran cuando lo necesites”…. 

Algo similar me ha tocado vivir no mucho, hay personas que tienen una pequeña deuda económica conmigo, hoy volví a sufrir una recaída económica, y apenas necesitaban unos cuantos soles, y me acerque a una persona muy querida por mí, le solicite aquel favor, y recibí un rotundo NO!, pensé que como siempre yo la auxiliaba, ella haría lo mismo, pero me equivoque, no fue así, entonces decidí que de lo que me debía me devolviera esa pequeña cantidad que yo necesitaba, y volví a recibir un rotundo NO! ….

Eso no es todo, me acerque a otra persona para solicitarle me devuelva todo o parte de lo que me debe y me lleve otra decepción inmensa, SE ENOJO PORQUE LE FUI A COBRAR, no soy de las personas que hago esto, porque quiero pensar que si aún no me devuelven es porque no pueden, sencillamente así, esta persona se molestó porque le pedía devolverme lo que era mío, aludiendo muchas cosas, soporte gritos e insultos, sentía un vacío espiritual inmenso, no puedo entender como hay personas en el mundo que cuando necesitan un favor se acercan con un semblante alegre, cortes y tratándote bien, y cuando uno le va a cobrar lo que es de uno, se molestan, y devuelven de malas ganas, es algo ilógico, “Sentimientos Encontrado” siento, me pongo a pensar que porque vivo esta situación, pienso que porque hay personas así, que defraudan a uno.

El mundo es una gran escuela, que día a día se aprende algo nuevo, y se conocen muchas cosas y personas, hoy aprendí varias lecciones, desde no confiarse en todos tus amigos, saber a quién acudir cuando necesites un favor, hasta aprender a quien le haces favores, porque puedes llevarte grandes desilusiones. Obviamente cuando uno hace un favor a alguien, lo hace desinteresadamente y no espera nada a cambio, esa es mi filosofía, pero no puedo dejar de lado las lecciones que uno aprende en el camino….